Comprar un cachorro de Mastín del Pirineo o Jack Russell Terrier - Mastín del pirineo | Jack Russell terrier | Criadero Gaspalleira

  ¿Me gusta pasar el tiempo al aire libre? ¿Soy una persona activa, o más bien sedentaria? ¿De cuánto tiempo libre dispongo? ¿Estoy dispuesto a dedicar parte de ese tiempo a mi nuevo compañero? Estas y otras muchas preguntas nos las deberíamos hacer de forma sincera antes de adquirir un cachorro, sin olvidar que siempre existirá el perro que necesitamos, sea de pura raza o cruzado.

  ¿Dónde buscarlo? una vez elegida la raza, lo mejor sería acudir a un criadero especializado en la raza, donde nos orienten sobre cual ejemplar se adapta mejor a nuestras necesidades, donde podamos observar el carácter de sus progenitores, ver en qué ambiente viven, como han sido criados y socializados. Todos estos datos nos ayudarán a elegir un ejemplar sano de cuerpo y espíritu.

  ¿A qué edad comprarlo? la edad ideal para separar un cachorrito de su madre es en torno a las 12 semanas de vida, cuando haya superado el Imprinting (primera y más duradera forma de aprendizaje) y el periodo de socialización. A esta edad ya se podrá apreciar su futuro carácter y tendremos un boceto de su futura morfología.

  Contrariamente a lo que se piensa, sus exigencias alimentarias no son excesivas en proporción a su tamaño. Aunque se trata de un animal de gran peso, su actividad física es moderada, por ello su ración de comida suele ser alrededor de 600-800 gr al día de pienso de buena calidad.

  La educación del Mastín del Pirineo no es complicada, son perros de buen carácter, aunque, como todos los perros, necesitan un mínimo de disciplina y reconocer la autoridad de sus dueños. Por experiencia, mi recomendación es que seamos pacientes y bondadosos con ellos, como ellos lo son con nosotros. Conseguiremos mucha más obediencia con el cariño y buen trato, que con los gritos y amenazas.

  Y una vez tomada la decisión, llega el momento de comprar o adoptar a nuestro cachorro. El Mastín del Pirineo es considerada una raza “rara”, ya que el número de ejemplares de pura raza es muy reducido (estamos hablando de que, pese a ser una raza española, el número de cachorros nacidos en España en los últimos años ronda los 100 ejemplares al año), así que tendremos que ser pacientes ya que posiblemente habrá que esperar algunos meses hasta encontrarlo. Lo mejor es visitar a los criadores de nuestra zona y alrededores, conocer a los futuros padres de nuestro cachorro, ver como crecerá y el tipo de educación que recibirá en los primeros meses de vida, los más importantes, que marcarán su futuro carácter. Una vez encontrado un criador que nos inspire confianza, posiblemente habrá que esperar varios meses hasta el nacimiento de nuestro cachorro.

 Al igual que los cachorros de Mastín del Pirineo, los cachorros de Jack Russell tienen que ser adecuadamente socializados desde sus primeros días de vida. Deben estar acostumbrados a ser manipulados, dejarse examinar, coger. Las tareas rutinarias que realizamos con todos nuestros cachorros, como pueden ser pesarlos y cepillarlos diariamente, dales el número de comidas diarias adecuadas para su edad, acostumbrando a cada cachorro a respetar la comida de sus hermanos, cortar sus uñas semanalmente, sacarlos diariamente varias veces al jardín, ya desde las 3 semanas de edad, ofrecerles unas horas de descanso en un lugar tranquilo, varias veces al día, de manera que superen la frustración de interrumpir el juego o de estar con los humanos  y perros adultos, tomar medicación (desparasitaciones), atender a la llamada…etc. Todas estas rutinas y la manera de hacerlas ayudarán a formar el carácter de nuestro pequeño, por eso yo siempre he pensado que la mano del criador se deja ver en cada uno de sus cachorros, y el CARÁCTER de sus cachorros es el principal aspecto distintivo de cada criadero, SU SELLO PROPIO E INIMITABLE.

  Entregamos los cachorros a partir de las 10-12 semanas de edad, lo que garantiza una adecuada socialización. En todo momento son tratados por veterinarios acreditados y se llevan a cabo al menos dos revisiones veterinarias antes de su entrega. Los cachorros que deben viajar al extranjero y que, por lo tanto, permanecerán con nosotros hasta cerca de los 4 meses de edad, son acostumbrados a ir de la correa, los llevamos de paseo a poblaciones cercanas, de manera que se acostumbran a viajar en coche, se familiarizan con los ruidos y situaciones propias de la ciudad, y a estar en contacto con personas desconocidas. Todo este trabajo, a veces no suficientemente valorado, garantiza que el cachorro será un adulto equilibrado, acostumbrado a muchas situaciones diferentes y capaz de asumir las nuevas experiencias sin miedo.

 Tanto si buscamos un cachorro para cría, exposición o compañía, al elegir un cachorro de raza pura, estamos garantizando que sus padres le transmitirán al pequeño  las características propias de la raza, tanto de morfología como de carácter. Al elegir un criador especializado en la raza (no un multicriador, de varias razas) estaremos seguros de que estas características no serán alteradas, y la pasión y amor por la raza y por sus propios perros que siente el criador será la mayor garantía de que estamos adquiriendo un cachorro sano y feliz.